lunes, 1 de octubre de 2012

La culpa de la crisis (y de todo lo demás) la tengo yo

 
   Soy yo el máximo responsable de todo lo que ocurre en España. Visto que nadie da el paso de reconocer nada, asumo todos los errores que nos han traído hasta ésta crisis y todas las decisiones nefastas alrededor de ella, ahora y antes de que todo comenzara.

   Pido perdón a todo el mundo. A los ricos por hacerles mas ricos y a los pobres por dejarles sin nada.

   Pido perdón a los banqueros por descubrir ese antro mafioso y clandestino que son las altas esferas bancarias. Por haber sacado a la luz sus trapos sucios, sus hipotecas subprime, sus fondos basura, sus bonos preferentes... sus pactos políticos, su especulación con la vivienda, sus desahucios... sus recibos de papel para ver mi saldo en el cajero.

   Pido perdón a los políticos... por pedirles ejemplo. Les pido perdón por conocer sus miserias. Les pido perdón por no entender por qué me roban, por qué me engañan, por qué me tratan como si tuviera cinco años eternamente. Les pido perdón por enterarme de sus malversaciones y cohechos, por sus tráficos de influencia, por el amiguismo o amigante ( amigo+mangante), les pido perdón por esperar que cumplan y hagan cumplir las leyes y por mirar única y dedicadamente por los ciudadanos. Únicos dueños del poder que detentan.

   Pido perdón a Europa por no cumplir con lo pactado en materia de economía. Le pido perdón por la falta de tejido industrial de mi país y por tener como únicos medios de ingresos... el turismo y el ladrillo. Por no saber generar riqueza de otro modo. Por no poner los cinco sentidos en la investigación y desarrollo de un modo de vida mas sostenible y por pedirle tanto dinero para proyectos en el campo, de los que solo se beneficiarán los intermediarios, y dinero para sanear las cajas de ahorros que inexplicablemente son sociedades privadas con dinero público (sólo cuando falta).

   Le pido perdón a los sindicatos que solo se acuerdan de defender mis derechos en la calle, en ambiente pre-bélico, cuando gobierna la idea opuesta. Por no entender al final nunca por qué se manifiestan. Si por mis derechos, o por los convenios, o por las víctimas de Franco, o por la crisis, o por odio, o por la república, o  por que se lo pide el guión...

   Les pido perdón a los nacionalistas y/o separatistas catalanes por no estar de acuerdo con esa fábula a la que llaman historia de los pays catalans. Por estar a favor de la idea de una España plural bajo la que conviven diversas culturas y lenguas que se enriquecen unas a otras formando nuestra idiosincrasia común como vecinos todos del mismo pueblo. Les pido perdón por no ser de allí y sentir toda Cataluña cómo una parte mas de España. Y les pido perdón y les perdono por su falta de coherencia, por su estrechez de miras y su altaneria burguesa de toda la vida... cómo en las calles del lÈixample.

   Le pido perdón a ETA por no permitir que mi conciencia vea a Amauir, Amalur, Bildu... como simples organizaciones que juegan en democracia a aportar nuevas ideas y defender otros valores. Les pido perdón por no olvidarme que éstos, vienen de aquellos. Que antes de hablar, mataron. Y eso nunca puede ser admitido en un estado dónde impere la ley.

   También le pido perdón a todos esos que sin hacer números o lo que es peor, haciéndolos, vivieron por encima de sus posibilidades. A aquellos que podían permitirse un piso de dos habitaciones pero vivían en un chalet, al que se compró un coche simplemente porque el anterior ya no le gustaba, a los que no conocen lo que hay alrededor de su pueblo pero tienen pulseritas de all-inclusive de los sitios mas dispares del planeta, tirando de visas y créditos. Les pido perdón a todos los que vivieron por encima de sus posibilidades y ahora reclaman despavoridos ayuda.

   Le pido perdón a los que de verdad necesitan ayuda y no la reciben. A ellos si. A ellos les pido perdón desde lo mas profundo de mi alma. A los que no comen, a los que no tienen un lugar dónde dormir. A los niños que no tienen juguetes ni infancia. Y a sus padres impotentes les pido perdón. Le pido perdón al que quiere trabajar, busca pero no encuentra. Le pido perdón a la mujer maltratada por no poder acabar con su sufrimiento. Y a las personas que no se valen por si mismas por no tener medios. Le pido perdón a los descapacitados por no darles la oportunidad de sentirse iguales.

Le pido perdón al que me necesita por vivir en una sociedad que solo busca excusas. Una sociedad que se parapeta en sus desgracias para no tener que sacar la cabeza y enfrentar la realidad. Una sociedad en la que cada uno de nosotros tiene la responsabilidad por acción u omisión de todo lo que sucede pero que únicamente asume los méritos en las victorias. Una sociedad que tendrá que pedir perdón por la falsedad de ayer, la amargura del hoy y el terrible mañana que dejará en las blandas manos de la generaciones venideras.  Simplemente por el mero hecho de no mancharse las suyas trabajando en la idea de un lugar mejor en el que vivir. 



  1.                                                                                  Fdo.  El tiempo








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