martes, 28 de mayo de 2013

Gracias por pedirme perdón...

   Gracias por pedirme perdón...

   La vida es algo mucho mas sencillo. Digamos que todo comienza en lo alto de la montaña, justo cuando acaban los inviernos. Y tras el deshielo, comenzamos a navegar el adolescente río que va buscando por donde ir. Por donde extenderse. Que abarcar. Y es irremediable que al final de todo ese viaje nuestra esencia acabe encontrando la sal de todo este trayecto en otras aguas, ya mas tranquilas. Pausadas y rítmicas como lo son las olas que acunan el mar de nuestro destino. Y allí, allí se y nunca he tenido dudas. Ahí es obvio que naufragaremos juntos. Porque navegar eternamente supone no haber vivido de veras. Y se que allí, acabaré feliz hundiéndome para siempre con todos los corazones que como el tuyo... han hecho que el mio latiera de felicidad.
 


No hay comentarios:

Publicar un comentario